Cotidiano (3)

- He caído en la cuenta que las cosas cambian más de lo que creía, la materia se transforma, evoluciona y en ocasiones debemos dejarla por más que sean ese paquete de ilusión y amores que hemos construido a través de nuestra vida y discurso.

- Me llegó la hora, que talito, llegó la hora de dejar de aferrarme una vez más de tanta utopía romántica que llevo dentro, mi situación no es favorable y debo olvidarme de murales, huelgas, textos marxistas por un tiempo (ahora ese será mi nuevo pasatiempo).

- La violencia y Luis Palau con su sonrisa diabólica me tiene aterrada más de lo normal. Mientras la visibilidad de Yuri es interrumpida con esos mechones cubre arrugas, que le impiden ver con quien se hace acompañar en esa campaña "limpia dinero" que ha tomado la ciudad.

- Quiero fijarme más, dejar de ser tan veloz y poder sentarme un rato a observar esos detalles, esos detalles del niño disfrazado de hombre araña, del hombre que se baña en la fuente del parque central y se peina para ir a un concierto y de ese mundo de gente que únicamente aplaude cuando una mujer enseña su cuerpo.

Realmente espero, espero que ciertas cosas cambien, que otras evolucionen y otra vuelvan más fuertes de lo que ahora son para así seguir la dialéctica constructiva que necesito para seguir creciendo.