lunes, 13 de septiembre de 2010

Anímico

Llevo varios meses metida en una caja de zapatos Reebok al fondo de mi closet.  He llenado por dentro con dibujos, frases y un par de fotografías que decidí me acompañaran a esta introspección.  Luego de mi estadía supe que posiblemente no había sido la mejor opción, me estaba volviendo en éso que odio tanto de mi.  Salí y/o me sacaron, esas cosas que nos persiguen, rutinas, relaciones de todo tipo, sobreviviencias económicas y amores olvidados en las afueras de esas porosas y alérgicas paredes de cartón.  

Tirándome de un sólo clavado a otras dinámicas, motivándome con esa relación codependiente que mantengo con lo que antes creía era "lo ideal", metiéndome de nuevo al ir y venir, experimentar, sumarme a procesos conexos de una forma inmadura y presipitada.  Resultado:  Una astillita dentro de mi y una gripe que aun llevo solapada en mi sombra.

Los días han avanzado, he/hemos tomado decisiones y repactado muchas cosas y relaciones, los días han dejado de lloverme por dentro, las nubes se han despejado y por un instante pensé que dos buena noticia había sido colgado en la ventana de mis sueños, pero como siempre me he dicho, sin forzar y sin empujar, las cosas suceden cuando no se tocan tanto.

Hoy estoy mejor, con una leve tristeza que tiene nombre y apellido, muy lejos de acá.  Y pues con una extraña y esperanzadora idea que pronto habrá una buena noticia, que llene mis sueños de prados verdes y los autos voladores, finalmente dejen de aparecerse.

No hay comentarios: